A finales del siglo XIX y principios del siglo XX en determinadas zonas de Catalunya (Penedès i Camp de Tarragona) tenía un importante protagonismo el uso de la 'gralla' (chirimía).
Los grupos de 'grallers' (instrumentistas de chirimía), normalmente integrados por tres chirimías y un tambor en aquel entonces, interpretaban música de baile, entremeses populares (por ejemplo: gigantes, gitanas, mojiganga, 'castellers') y actuaban en actos festivos y en festividades señaladas (carnaval, 'caramelles' -coplas callejeras por Pascua-, etc.).
Uno de estos grupos, quizá el más famoso de la época, fue la 'colla dels Bastarons' de Vila-rodona, que encargó a Francesc Toldrà las diez piezas para chirimía que se presentan en este volumen.
