Encrucijada de todas las obsesiones e intuiciones de Hermann Hesse (1877-1962) y exponente de su singular talento para el relato, El lobo estepario se inscribe dentro del empeño, patente a lo largo de toda su obra, por iluminar la zona oscura de la condición humana a fin de poner al descubierto su carga trágica y su incierto destino.
Ser solitario e incomunicado, extraño y extrañado, Harry Haller, protagonista de esta emblemática novela, ha acabado convirtiéndose en un arquetipo literario en el que se reconocen quienes padecen los efectos deshumanizadores de una sociedad que no conoce la solidaridad y propicia el aislamiento.