«El que ha sido para mí el mejor libro de no ficción del año ofrece un audaz repaso de la historia a través de los tejidos (como decoración, moneda, ritual o mucho más). Uno de los textos más extraordinarios que he leído en años».
Bloomberg Opinion
«Esta es una historia de enorme complejidad. Sin embargo, ni Postrel ni nosotros (como lectores) perdemos nunca el hilo. El tejido de la civilización es un libro fascinante, también bastante persuasivo: al final se demuestra que los textiles dieron forma al mundo».
The Times
«Postrel nos conduce por un viaje tan épico y variado como la propia Ruta de la Seda. El tejido de la civilización se presenta minucioso, como la muestra de un brocado renacentista florentino: tejido con cuidado, con la técnica precisa, con los colores como adecuada mezcla de sombra y brillo, como la representación precisa de toda la tela».
The New York Times
«La autora ha hecho un trabajo excelente a la hora de destacar cómo los textiles cambiaron realmente el mundo».
The Wall Street Journal
«La producción de tejidos no ha recibido suficiente reconocimiento en la historia (quizá por su propia sofisticación), y aún menos su continua aportación a la innovación tecnológica humana. Un error que la erudita y exhaustiva obra de Virginia Postrel intenta, en buena medida, corregir».
Wired
La historia de la humanidad es la historia de los tejidos, tan antigua como la propia civilización. Desde que se hiló la primera hebra, la necesidad de obtener tejidos ha servido de impulso para la tecnología, los negocios, la política y la cultura.
En El tejido de la civilización, Virginia Postrel ha llevado a cabo una investigación única en su género que sintetiza arqueología, cultura, economía y ciencia para construir una historia sorprendente. El negocio de los textiles financió el Renacimiento italiano y el Imperio mongol; nos dio la contabilidad de partida doble y las letras de crédito, e hizo posible la creación de obras tan significativas como el David y el Taj Mahal. Desde los pueblos minoicos, que exportaban a Egipto telas de lana teñidas de un preciado púrpura, hasta los romanos que vestían seda china de un valor exorbitante, el negocio y la producción de textiles puso los cimientos para que el mundo antiguo recorriera los caminos de la cultura y la economía. La búsqueda de tejidos y tintes ;tal y como sucedía con las especias y el oro; llevó a los marineros a atravesar mares extraños y a la forja de una economía global. El tejido también ha sido la fuerza motriz que se esconde tras el desarrollo tecnológico: los orígenes de la química se encuentran en el tinte y en el acabado de las telas. Los albores del código binario ;y quizá de todas las matemáticas; se hallan en la tejeduría. La cría selectiva para la producción de fibras dio paso al nacimiento de la agricultura. La correa de transmisión llegó de la mano de los productores de seda. Igual que la microbiología.
Ampliamente documentado y narrado con extraordinaria maestría, El tejido de la civilización cuenta la suntuosa historia del producto más influyente del mundo.