Lope de Vega trazó en esta obra una de sus comedias más complejas. La colectividad, depositaria del derecho de resistencia si la jerarquía pierde su legitimidad, hace uso de ese derecho y restablece el orden. En una primera acción, intrahistórica, el Comendador es tirano y lascivo con sus vasallos; en la segunda acción, histórica, quebranta el orden político inspirando la toma de Ciudad Real en contra del Rey. El autor plantea el tema según las categorías mentales de la época.