Vienen a estas páginas muy amenas y agudas semblanzas de cientos de escritores e intelectuales de ambos bandos, de los que la guerra civil arrancó lo más noble o lo más triste y abyecto. El célebre y el desconocido, el audaz y el cobarde, el perseguido y el perseguidor, la víctima y el victimario. De todos ellos, de sus actos y palabras, se han traído aquí vestigios insoslayables que algunos autores trataron de borrar, manipular u olvidar con el paso de los años y que otros, por el contrario, no lograron preservar y dar a conocer. Andrés Trapiello, dieciséis años después de la primera publicación de Las armas y las letras, revisó y amplió el texto original convirtiéndolo en un libro nuevo, repleto de reveladoras aportaciones y testimonios gráficos y escritos; texto que recuperamos en esta edición. Tratado de armas y de letras, pero sobre todo libro que cambió algunos de los prejuicios y lugares comunes que más habían esclerotizado la literatura española, necesitada de algo más que del blanco o del negro para ser comprendida, muchos leyeron este relato como una apasionante novela, pero sigue siendo, sobre todo, más que nunca, una mirada veraz y misericordiosa, necesaria e imprescindible sobre nosotros mismos.