A principios de 1940, los estragos de la guerra se hacen notar incluso en la pequeña población de Chilbury, en el condado de Kent. Con la mayoría de los hombres en el frente, el vicario decide cancelar los ensayos del coro, pero la directora, Primrose Trent, se opone a esta decisión y convierte el tradicional coro mixto en un coro formado solo por mujeres. Bajo su firme batuta, las chicas del coro siguen adelante, superan los desafíos propios del tiempo que les ha tocado vivir y hasta participan en un concurso del condado. A través de la narración de cuatro mujeres del coro, que se alternan a lo largo de la novela, el lector sigue las idas y venidas de los habitantes de Chilbury. A pesar de las duras circunstancias propias de la guerra —racionamiento, cortes de luz, toques de queda, bombardeos—, habrá lugar para el amor, traiciones, disputas familiares y se revelarán secretos. Las protagonistas comprobarán hasta qué punto las creencias más arraigadas pueden ser puestas a prueba en tiempos difíciles.