En el siglo XIV el Papa Benedicto XII de Aviñón promulga las Constituciones para la reforma de las ordenes religiosas. A partir de este hecho, se inicia una confrontación entre la comunidad religiosa del monasterio de las Hermanas clarisas de Santa María de «Petras Albas» de la villa de Sarrià y el pontífice.
La abadesa Sobirana Olzet y la comunidad de las Hermanas clarisas defenderán sus privilegios que fueron otorgados por la reina Elisenda de Montcada y de Pinós, donde se les reconocía la autogestión de su patrimonio económico y la libertad de movimiento del «coenobium».
Una primera novela madura, reflexiva, construida con ingenio, que nos transportará a una época que la autora ambienta y transmite con cuidado y delicadeza, al lado de unos personajes que emocionan y se hacen cercanos a pesar de los siglos de distancia que nos separan de ellos.