¿Qué hace todo el día con el móvil encerrado en su habitación? ¿Ahora por qué llora, si hace un momento estaba alegre? ¿Por qué no me cuenta nada? ¿Por qué me habla así?
Pero… ¿qué le pasa?
Muchos padres y madres asocian la palabra adolescencia con conceptos como conflicto, rebeldía e inseguridad. Cuando surge un problema con nuestro hijo o hija, es importante entender que su conducta suele ser una señal de alerta y que casi nunca se produce por una sola causa. El adolescente forma parte de un sistema complejo, la familia, y es necesario que todos sus miembros se impliquen en la tarea de comprender lo que está ocurriendo. Solo así podemos conseguir una convivencia sana.
Este libro pone sobre la mesa algunos de los problemas más comunes que afrontamos como padres ante el paso de nuestros hijos por la adolescencia y revela conceptos clave que nos ayudarán a ver esta etapa desde un nuevo prisma. Es posible vivir la adolescencia como una experiencia constructiva, positiva y enriquecedora para todos.
Una mirada positiva y rigurosa a una de las etapas más cruciales en el desarrollo de nuestros hijos.