Miguel Gane, autor referente de la nueva generación de poetas, nos transporta en su tercer poemario a un universo lleno de sensualidad, en el que los sentidos son protagonistas esenciales. Poemas que cuentan el inicio y fin del amor desde el erotismo y lo corpóreo como un susurro leve que enarbola la piel.
Desde Madrid a Londres pasando por París, el mundo fue nuestro por un instante. Nos quemamos en el fuego, nos revolcamos en la tierra y nos empapamos en el mar. Tan vivos, tan libres; todo lo probamos. Pero entendimos que estábamos ante el fin cuando aquello que nos había unido empezó a separarnos y, en el aire, fuimos dos aviones con rutas diferentes. Lo que queda después del amor es lo que nos define. Llevas mi piel en los labios, pero, nunca lo supe con seguridad, ¿los usaste para morderme o para besarme?