Para Winckelmann, la belleza del arte trasciende el tiempo y el espacio, por eso es tan importante que tengamos las herramientas adecuadas para comprenderlo. Estas páginas, que se publicaron por primera vez en Dresde en 1764, son un recorrido por las de la continuidad del arte a través de distintas civilizaciones completamente novedosa. manifestaciones artísticas del mundo antiguo partiendo de la idea de que, como la vida, han sufrido un proceso evolutivo. Pasando por egipcios, etruscos, persas y romanos, se detiene a analizar en profundidad el arte de los griegos, lo que proporcionó una visión de la continuidad del arte a través de distintas civilizaciones completamente novedosa. Su ojo crítico con lo que se venía haciendo hasta la fecha y su atención al detalle convirtieron esta en una obra de referencia e inspiración para grandes artistas y teóricos como Goethe o Schiller; aún hoy, continúa siéndolo para todo aquel que se acerque al estudio del arte clásico.