Joy y su hermana Claude siguen adaptándose a la vida estable en Reino Unido, pero Claude cada vez se comporta de forma más rebelde y complicada y Benny, el mejor amigo de Joy, empieza a sufrir el acoso de un compañero de clase. Nuestra protagonista, empeñada, como siempre, en ver el lado positivo de todo lo que ocurre, no solo se propone ayudar a Benny y a su hermana, sino también a su abuelo, que se siente solo, ¡e incluso a su gato! ¡Llega la continuación de Una chica llamada Joy!