Martín Circo Martín gana el mayor premio jamás concedido en la historia de la televisión: tres millones de euros en apartamentos, trajes, coches, obras de arte, equipos electrónicos... y esas bolas chinas que relajan a los chinos y ponen nervioso al resto del mundo. Pero la buena suerte también puede ser mala, y el premio activa una trampa económica que arroja a Martín por una autopista vertical al más kafkiano de los infiernos.
Sí importa el modo en que un hombre se hunde es una tragedia contemporánea, una sátira divertidísima y despiadada sobre la maquinaria financiera que nos aplasta y cómo la sangre de un hombre no basta para saldar su deuda, confirmando a Rodrigo Cortés como una de las plumas más afiladas, ingeniosas y ácidas de los últimos años.