Una exaltación del amor por la vida que Fernando Sánchez Dragó mostró a lo largo de su trayectoria, a través de los ojos de su madre Elena
Cuando se cumple un año de la repentina muerte del escritor Fernando Sánchez-Dragó, Emma Nogueiro, su última compañera de vida, le dedica un homenaje bello y revelador en Querido Nano. Partiendo de las cartas que Sánchez Dragó y su madre Elena se intercambiaron en vida, se teje una suerte de biografía repleta de emoción, en la que el lector recorre los hitos más fundamentales de nuestra historia reciente al tiempo que descubre un sinfín de detalles en torno a la vida de uno de los intelectuales más polémicos de nuestro país. Un relato increíble sobre unos años en los que se pudo vivir con tanta intensidad como felicidad.